Imagina que una mañana, tras levantarte de la cama, vas a beber agua con los ojos medio cerrados todavía y te das cuenta de que esta sale de un color rosa intenso. La primera reacción sería frotarte los ojos para comprobar que no estas soñando y la segunda… ¿beberías el agua sin darle más importancia?

En este caso, los habitantes de Onoway (Alberta, Canadá) llamaron en masa a las autoridades para alertar lo que estaba sucediendo. Allí intentaron tranquilizarles explicándoles que tras una fuga en la planta de tratamiento local, se había liberado una sustancia química a causa de la avería de una válvula. Esta sustancia no es otra que permanganato de potasio que, como ha explicado el propio alcalde, no es dañina para la salud de los habitantes de Onoway.

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Dicha sustancia es utilizada con el fin de eliminar el hierro y el sulfuro de hidrógeno del agua. Aunque según han asegurado los expertos al alcalde esta no puede hacer ningún daño, en grandes cantidades puede llegar a irritar los ojos y la piel.

Fuente: sciencealert.com

Redacción QUO