En 1998, Pedro Duque se convirtió en el primer ciudadano español en el espacio. Allí pasó nuevo días supervisando un módulo experimental de la Agencia Espacial Europea (ESA). Cinco años más tarde repetiría con la Misión Cervantes, visitando la Estación Espacial Internacional diez días.

Desde aquellos años se ha convertido en una figura referente a la hora de hablar del cosmos y lo hace con autoridad, no siempre exenta de polémica en sus afirmaciones. Por ello, cuando lo entrevistaron en el programa Esperando a Chester y afirmó que la posibilidad de que estemos solos en el universo es mínima, fueron muchos los que se sintieron tentados de responderle.

Pero Duque no es el único experto que cree en E.T. Allí está Stephen Hawking quien asegura que para su “cerebro matemático sólo los números me hacen creer que la existencia de los extraterrestres es perfectamente posible.” La matemática neuronal del británico se basa en un simple cálculo: la misión espacial Kepler ha permitido deducir que existen al menos 40.000 millones de planetas en zonas habitables de nuestra galaxia. Y que la Vía Láctea es solo una entre al menos 100.000 millones de galaxias en el universo.Es obvio que Seth Shostak director del SETI (Instituto de Búsqueda de Vida Inteligente) también confía en la existencia de vida alienígena, de lo contrario su trabajo no tendría sentido.

Algo similar ocurre con Sara Seager, astrofísica del MIT y una de las científicas que más exoplanteas ha descripto en el mundo. En el ámbito de las ciencias del espacio hay un consenso casi unánime al respecto. Fergus Simpson, cosmólogo de la Universidad de Barcelona, Bernard Bates, profesor de física de la Universidad de Pudget Sound, Maggie Aderin-Pocock, doctora en ciencias del espacio del University College de Londres, la astrónoma Michelle Taller, de Harvard o el astrobiólogo Lewis Dartnell, del University College de Londres son solo algunos ejemplos.

Pero también creen en ella, biólogos, como William Bains, del MIT, profesores de biomecánica como Michael LaBarbera de la Universidad de Chicago, la geóloga Diana Valenciao el biólogo Bjørn Østman de la Universidad Estatal de Michigan.El propio Albert Einstein, hace casi un siglo se preguntaba “¿Por qué la Tierra debería ser el único planeta con vida? No hay nada singular en ella en cualquier otro aspecto?”.

Lo que más sorprende entonces de la afirmación de Duque no es que crea en la vida extraterrestre, sino que su discurso ha cambiado bastante desde 2011, cuando afirmaba que nunca los veríamos. ¿A qué se debe el cambio? Muy sencillo. Hasta ese año la cifra de planetas habitables descubiertos sumaba 594. Desde entonces a la lista se han agregado más del doble, 1.209 nuevos planetas descubiertos en apenas 4 años. La cifra astronómica (literal y figurativamente) ha hecho concluir a los científicos de la Nasa que en 2025 encontraremos vida extraterrestre. Habrá que comenzar a hacer una porra para saber qué día exactamente. Sería irónico que sea justamente el 4 de mayo, día de la Guerra de las Galaxias.

Juan Scaliter