Las bondades de los frutos secos sobre nuestro organismo no es nada nuevo: buenos para mantener a raya tu colesterol, fuente importante de minerales y de grasas saludables, disminuyen el riesgo cardiovascular, son ricos en proteínas… pero ahora sumamos una faceta más que seguro que animará a más de uno a añadirlos dentro de su dieta diaria. Un consumo de al menos 6o gramos de frutos secos al día puede llegar a mejorar la función sexual.

Según destaca la agencia de noticias SINC, expertos del Centro de Investigación Biomédica en Red de la Fisiopatología de la Obesidad y Nutrición, pertenecientes a la Unidad de Nutrición Humana de la Universitat Rovira i Virgili (URV), lo han demostrado dentro del primer estudio de intervención nutricional en hombres sanos y en edad reproductiva. ¿Su objetivo? Descubrir si existía un efecto del consumo regular de frutos secos en la función sexual, y sí que lo han conseguido demostrar: los resultados destacan que una dieta occidental complementado con la ingesta de nueces, avellanas o almendras podría mejorar el deseo sexual y la función orgásmica.

El estudio se enmarca dentro del proyecto FERTINUTS, el cual está creado para evaluar los efectos de estos alimentos en la calidad del semen. 83 hombres se ofrecieron a ello. Todos debían seguir una dieta occidental (pobre en fruta y verdura y rica en grasas de origen animal). Los participantes se dividieron en dos grupos: uno mantuvo su dieta habitual durante 14 semanas, mientras que el otro cumplimentó su dieta con 60 gramos diarios de una mezcla de nueces, avellanas y almendras. Luego, cada uno debió rellenar un cuestionario de 15 preguntas sobre la función sexual, internacionalmente validado (conocido como IIEF-15) al inicio y al final del período de intervención. Y, ¿cuáles fueron los resultados?

Quienes siguen este tipo de dieta no saludable, si al menos le añaden una parte de frutos secos de forma regular, puede ayudar a mejorar el deseo sexual perdido e incluso mejorar la función orgásmica. Los investigadores también apuntan que se requieren estudios con más participantes para confirmar estos resultados y aclarar los posibles mecanismos implicados en estos beneficios.

Y es que claro, sería interesante saber si una dieta mediterránea sana con la suma de los frutos secos podría a ser incluso mucho más efectiva.

Alberto Pascual García