Hoy, prácticamente todo el mundo tiene un ordenador en su casa. Pero hubo un tiempo en que estos aparatos eran realmente excepcionales, aparte de que no resultaban muy manejables. Ahora, el estudio londinense INK, y los fotógrafos del estudio gráfico Docubyte, han reconstruido varios de estos primitivos ordenadores, y los han retratado en todo su esplendor. ¿Os imagináis como sería que cada empleado de una oficina tuviera que trabajar con uno de ellos?

Fotos: ING/Docubyte.

http://www.docubyte.co.uk/

http://www.weareink.co.uk/