Dice un dicho popular que «más sabe el diablo por viejo que por diablo«. Quizá por esta cuestión un estudio publicado en la edición especial de British Medical Journal haya concluido que los jefes de gobierno envejecen antes que ninguno de nosotros. Incluidos sus compañeros de la oposición, que sufren menos desgaste por no haber conseguido llegar a lo más alto.
Según un estudio capitaneado por Anupam B. Jena, investigador de la Universidad de Harvard y del Hospital General de Massachusetts, “los presidentes tienen una mortalidad más acelerada en comparación con sus oponentes”. Basándonos en sus datos, hay un incremento de mortalidad en aquellos que ganaron las elecciones de un 23%. Esto se traduce en casi tres años menos de vida que sus rivales políticos.
Para llegar a estas conclusiones, el equipo de Jena analizó exhaustivamente la lucha política en un total de 17 países desde 1722 hasta 2015. Después, compararon la edad a la que fallecieron 279 políticos que triunfaron en los comicios con la de sus 261 rivales perdedores que nunca llegaron a gobernar. Los resultados no dejaban lugar a dudas: los que llegan al poder viven menos y envejecen antes. Así que estas elecciones, ten este dato en cuenta antes de depositar tu voto en la urna. Vas a tener que decidir a quien le quitas casi tres años de vida.
La vejez prematura es un rasgo que puede observarse fácilmente y llegar a nuestras propias conclusiones. En esta fotogalería, verás el antes y el después de algunos presidentes. Las fotografías hablan por si solas. Así les dejó el poder.
Fuente: eurekalert.org
