Andrew Thomas Hunt aprendió las bases de la fotografía en el instituto y en un campamento de verano al que acudió de adolescente. De resto, es totalmente autodidacta. Desde sus años de universidad no volvió a coger una cámara hasta el año 2000, y su primera sesión titulada Bareback fue publicada en la revista francesa Photo. 

A partir de ese momento ha trabajado para las publicaciones alemanas Stern y Matador, para la BBC de Canadá y para los calendarios eróticos de la editorial Heye Verlag. Apuesta por un erotismo elegante que no pierde su esencia más salvaje y combina con extremo gusto imágenes en color y en blanco y negro.