Pues, en gran medida, de la inteligencia. Varios estudios neurológicos revelan que la habilidad para llevar bien el ritmo está relacionada con los procesos cerebrales responsables del razonamiento y la resolución de problemas.

Los últimos en comprobarlo fueron los científicos del Instituto Karolinska y de la Universidad de Umea, en Suecia, que determinaron que: “Esta capacidad de precisión en la coordinación refleja la estabilidad de la actividad neuronal en el cerebro”.

Enviado por Fernando Almeida, Ourense

Redacción QUO