La isla de Nueva Guinea fue uno de los muchos escenarios bélicos en los que se libró la Guerra del Pacífico. Los japoneses conquistaron el territorio en 1942 y, dada su proximidad a Australia, el general Douglas MacArthur ordenó iniciar la contraofensiva lo más rápidamente posible. Aquella campaña se extendió también a las cercanas Islas Salomón, dónde (entre 1942 y 1943) se libró la crucial campaña de Guadalcanal.

Lógicamente, toda Nueva Guinea está plagada de auténticas reliquias que recuerdan aquella contienda. Y ahora acaban de aparecer otras dos. Se trata de dos bombarderos B-25 del ejército estadounidense que han sido encontrados bajo el mar por buceadores del proyecto Recover, destinado a recuperar la mayor parte posible de restos bélicos.

Los aviones están, como era de esperar, muy oxidados. Aún así se planea sacarlos del fondo del mar para exhibirlos en un museo local. De cualquier forma, a lo largo de todo el territorio de Papua Nueva Guinea se pueden encontrar numerosos restos bélicos de la II Guerra Mundial, incluyendo tanques y baterías de cañones. En esta galería os mostramos varios de ellos.

Imagen de los dos aviones B-25 encontrados bajo el mar.

Restos de un blindado japonés.

Un caza tipo zero japonés.

Un avión de carga de las USA AIR Forces.

Un viejo tanque japonés, pintado con vivos colores para que lo vean los turistas.

Un oxidado machete de los marines.

Un cañón antitanque japonés perdido en la espesura.

Una batería antiaérea japonesa.

Este tanque japonés modelo Chi-Ha, se conserva casi intacto.

Este es el aspecto que tiene actualmente el bunker del almirante Yamamoto.

Imagen de otro cañón anticarro japonés.

Los restos de un avión estadounidense dedicado a misiones de observación.