Aunque estamos lejos de poder viajar al pasado o al futuro, los viajes en el tiempo son un tema recurrente en el cine, estos son los viajes en el tiempo imaginados más interesantes

¿Es posible viajar en el tiempo? La respuesta es sí, porque lo estás haciendo ahora mismo: te estás moviendo hacia el futuro a la impresionante velocidad de un segundo por segundo. Aunque la percepción del paso del tiempo es subjetiva, en realidad siempre te mueves en el tiempo a la misma velocidad, tanto si estás viendo cómo se seca la ropa como si estás pasando una noche de juerga con un amigo que se te hace demasiado corta.

Pero éste no es el tipo de viaje en el tiempo que ha cautivado a innumerables escritores de ciencia ficción. En películas y series como «Doctor Who», «Star Trek» o «Regreso al futuro», los personajes se suben a algún vehículo para volver al pasado o saltar hacia el futuro. Ahí empiezan los problemas.

Como señaló el físico Stephen Hawking «la mejor prueba que tenemos de que el viaje en el tiempo no es posible, y nunca lo será, es que no hemos sido invadidos por hordas de turistas del futuro». Un artículo reciente nos da y nos quita la esperanza. El viaje en el tiempo puede ser teóricamente posible, pero no se puede cambiar nada.

Supongamos que viajamos al año 2019 y se interviene en la vida del paciente cero para evitar la epidemia. Según el nuevo estudio, las consecuencias del pasado no se pueden cambiar, así que la pandemia seguiría ocurriendo de alguna manera. «Podrías intentar evitar que el paciente cero se infectara, pero al hacerlo te contagiarías del virus y te convertirías en el paciente cero, o lo haría otra persona», explicó el autor Fabio Tobar de Universidad de Queensland.

Paradojas o no, el cine y la televisión son nuestras máquinas del tiempo personales:

Cronocrímenes (2007)

El thriller de bajo presupuesto de Nacho Vigalondo es probablemente la prueba final que cualquiera necesitaría para aceptar que el viaje en el tiempo puede ser la tecnología de ciencia ficción más fácil de filmar con un presupuesto reducido. Al igual que muchas películas de este tipo, Los Cronocrímenes juega con las paradojas inherentes a los viajes en el tiempo. Al público de festivales como el Fantastic Fest, donde ganó el premio a la mejor película, no pareció importarle demasiado.

Predestinación (2014)

Esta película de los hermanos Spierig se basa en un relato de Robert Heinlein y es tan compleja que el riesgo de espoiler es alto. La actriz Sarah Snook es la atribulada Jane, una policía que viaja en el tiempo y que es la protegida del oficial Ethan Hawke, otro viajero. Durante casi la mitad de la película, el viaje de Jane es un relato sin ciencia ficción de una persona transexual que se enfrenta a los secretos que su cuerpo ha guardado durante toda su vida. Después se convierte en algo mucho más extraño.

La excelente aventura de Bill y Ted (1989)

Un jovencísimo Keanu Reeves es «Ted», Theodore Logan, un bondadoso vagabundo que viaja en el tiempo acompañado por su intrépido mejor amigo Bill (Alex Winter). Los dos recorren toda la civilización occidental en su cabina telefónica para secuestrar a personajes históricos, utilizarlos para no suspender Historia y garantizar la seguridad de la raza humana. Las reglas técnicas no se aplican mucho aquí; en cambio, el mensaje es claro: un buen amigo se quedará contigo hasta el final de los tiempos.

Al filo del mañana (2014)

En esta película no hay máquina del tiempo. El teniente coronel Bill Cage (Tom Cruise) es un soldado que, sin darse cuenta, se encuentra luchando en primera línea durante una invasión alienígena que amenaza con apoderarse de la Tierra. Tras ser expuesto a la sangre del alienígena, queda atrapado en un bucle temporal, atascado repitiendo el mismo día una y otra vez, convirtiéndose en una despiadada máquina de matar con cada día repetido que pasa. La idea de «El día de la marmota», pero con tiros. Sin embargo la resolución es suficientemente compleja para dar que pensar sobre las paradojas temporales.

12 Monos

Si alguien se te acercara por la calle y te dijera que viene del futuro y que ha vuelto para detener un virus que destruye la sociedad, ¿le creerías? Bueno, quizá ahora sí, pero la película 12 Monos se estrenó en los 90. James Cole (Bruce Willis) es enviado al pasado desde 2030 para evitar que un virus devastador se propague y, claro,  es inmediatamente capturado e internado en un manicomio. Allí conoce a Jeffery Goines, interpretado por Brad Pitt, que es un acérrimo activista anticorporativo y ecologista. Ya se puede ver hacia dónde va esto.

Looper (2012)

Joseph-Gordon Levitt canaliza el malote que lleva dentro para actuar como la versión más joven de Bruce Willis, clavando (con la ayuda de algunos CGI y prótesis) la omnipresente presencia de acción de Willis. El guionista y director Rian Johnson, que es el mejor argumento que se ha hecho en el cine para decir que «si se prohíbe el viaje en el tiempo, sólo los forajidos podrán viajar en el tiempo», trata sabiamente la tecnología como un hecho, centrándose en cambio en los escenarios dramáticos que crearía su uso por parte de los humanos. El resultado es una de las películas más emocionantes sobre viajes en el tiempo de las últimas décadas, y una clara evidencia de por qué Johnson pronto tomará una película de Star Wars bajo su ala.

Tenet (2020)

Un clásico rompecabezas del director Christopher Nolan, que también está detrás de Origen y Memento. La idea central que la impulsa es a la vez compleja teóricamente y requiere una explicación constante en pantalla. En las películas de Nolan siempre hay al menos una persona que intenta entender lo que está pasando exactamente, y es lógico que el público esté tan confundido como el protagonista (John David Washington), especialmente al principio. Una película que hay que ver con la mente abierta, porque el tiempo no siempre tiene por qué discurrir hacia el futuro.

Primer (2004)

Primer es la película por excelencia para cualquier aficionado a los viajes en el tiempo. Con un bajo presupuesto de sólo 7.000 dólares, recaudó más de 800.000 dólares en taquilla, lo que la convierte en una de las películas independientes más exitosas de todos los tiempos. Dos ingenieros crean accidentalmente un aparato para viajar en el tiempo durante sus propios experimentos, y comienzan a utilizarlo en beneficio propio. Sin embargo, su relación se lleva límite junto con la línea temporal que alteran. Una película que hay que ver varias veces.

Regreso al futuro I, II y III (1985, 1989, 1990)

El viaje épico en tres partes de Marty McFly (Michael J. Fox) y su mentor el científico loco Doc Brown (Christopher Lloyd) demuestra que incluso las acciones de un adolescente insignificante marcan un universo de diferencia. Hay poco que añadir a un debate popular sobre estas películas, aparte de señalar su empeoramiento con cada entrada sucesiva, pero eso no quita la brillantez de la narración del director Robert Zemeckis. Ningún punto de la trama se desaprovecha.  Al mismo tiempo que se meten en la historia, los personajes también hacen historia, y desde ese punto de vista, es difícil imaginar que alguien sienta la necesidad de volver atrás para mejorar esta trilogía.

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