Usar cuerpos donados a la ciencia para entrenar a los futuros cirujanos es una práctica que podría tener los días contados. Artistas y científicos británicos han utilizado una impresora 3D para fabricar un maniquí sorprendentemente parecido a un cuerpo humano. Los geles de silicona y las fibras que han usado imitan la carne humana con un nivel de realismo sorprendente. Los creadores del invento aseguran que servirán para que los estudiantes de cirugía se acostumbren a la sensación que produce cortar y coser a una persona viva.

Idéntico a nosotros

Los diseñadores han analizado imágenes de los órganos humanos tomadas por tomografía computerizada para imprimir el corazón, los pulmones y los principales vasos sanguíneos. Los alumnos pueden abrir y cerrar el paciente artificial como si de una persona se tratara.

Foto: El diseñador principal del proyecto, Richard Arm.

 

Superrealista creación

Los artistas han pensado en todo. Es posible rellenar sus venas y sus órganos más importantes con sangre artificial para entrenar a los alumnos en cómo reaccionar en el caso de que un paciente comience a perder sangre rápidamente. También puede conectarse a un equipo de ventilación para imitar el movimiento del pecho del paciente.

Foto: Nottingham Trent University

 

Lección fundamental

Esta imagen es una de las razones que pueden empujar a un cirujano novato hacia el lavabo. Los artistas no han perdido detalle para que, en el momento de la verdad, la intimidad biológica de l cuerpo humano no cause repulsión.

Foto: Nottingham Trent University