En los museos te miran mal si te acercas mucho a un cuadro para verle la textura, la pincelada, la técnica. Pero en Google Art Project nadie te dice nada. Incluso te ayudan. La idea consiste desde hace dos añoes en digitalizar las grandes obras maestras de la pintura universal, y ahora se amplía. Así, de las 1.000 obras que ya estaban incluidas en su catálogo se ha pasado a más de 30.000, gracias, entre otros, a nuevos museos españoles:

Museu Nacional d’Art de Catalunya

Museo de Bellas Artes de Bilbao

Museo Art Nouveau y Art Déco Casa Lis de Salamanca

Fundación Banco Santander

Instituto Valenciano de Arte Moderno

Además, el Museo Thyssen-Bornemisza y el Centro Nacional Museo de Arte Reina Sofía repiten la experiencia y añaden los recorridos virtuales por ambos museos.

En esta galería os mostramos algunas de las obras de esta pinacoteca virtual y explicamos el proceso que se ha seguido para digitalizar los cuadros.

La anunciación

Las anunciaciones son un tema recurrente en la obra de El Greco. Concretamente ésta, fue pintada en 1609 y se diferencia de otros lienzos similares en que el ángel posa sus pies en un suelo embaldosado, herencia del Renacimiento italiano, y que además del Espíritu Santo encarnado en forma de paloma, aparecen otros personajes que representan a las virtudes cristianas: la caridad, la prudencia y la templanza. Es un cuadro cuya técnica demuestra un acabado muy rápido y los expertos consideran que fue incluso finalizado por el hijo del pintor, Jorge Manuel.

La llamada de Dios

La pinacoteca de Google permite ver los cuadros en detalle, como ocurre con este fragmento de La anunciación, un lienzo enorme que en su totalidad mide tres metros de alto por dos de ancho. El brazo extendido del ángel significa la vocación, la llamada de Dios.

Lavanderas en Arlés

Paul Gaugin conoció a Vicent Van Gogh en 1888 y durante dos meses vivieron juntos en Arlés en el sur de Francia. Allí,  pasa casi todas las jornadas al aire libre, en el campo dibujando y pintando con su amigo Vicent, para después reunirse por la tarde a discutir y comentar sus respectivos trabajos. En los primeros cuadros de Arlés, Gauguin representa la campiña provenzal y la actividad de los campesinos, pero realmente sus imágenes no son una fotografía de la naturaleza o de una escena costumbrista sino la imagen de su ánimo rebelde e impetuoso. Prueba de ello es esta obra llamada Lavanderas en Arlés, en ella podemos apreciar las singulares características del pintor  como es capaz de crear una escena de temática popular, dónde se representa a unas lavanderas anónimas en sus quehaceres diarios con un marcado acento personal, a partir de la expresividad cromática, el rechazo a la perspectiva y la utilización de zonas amplias y planas.

Esta composición destaca por el uso tan expresivo que hace del color con tonos fuertes, vivos y muchas veces arbitrarios que dispone en grandes planos delimitados por ritmos lineales curvos. El artista configura un nuevo espacio creado a partir de un encuadre dramático y con los colores planos consigue una intensidad poética excepcional, que serán utilizados al mismo tiempo con valor decorativo y simbólico.

Con esa forma tan personal del tratamiento cromático junto con el encuadre insólito, consigue que una escena costumbrista se convierta en una imagen totalmente atípica mezcla de sueño y realidad.

influencia japonesa

En esta obra, Gaugin renuncia a la perspectiva, suprime el modelado y las sombras, creando así la sensación de un solo plano como ocurría en las estampas japonesas. Al igual que casi hace desaparecer a las figuras del cuadro que con su dibujo simplificado casi ni siquiera parecen humanas. Y la luz desaparece de la escena  porque será la exaltación del color  la que dé luminosidad a la composición. Aunque la fascinación de esta obra radica en la calma de las zonas anchas de color, casi dando la sensación de cómo si realizara vidrieras y crea de forma magistral a las protagonistas del cuadro ya que las grandes figuras se recortan con trazos de color sobre el fondo como sin fueran esculturas.

San Sebastián atendido por las santas mujeres

Tras ser martirizado por una lluvia de saetas, San Sebastián fue atendido y curado por las santas mujeres, momento que recoge Ribera en este espectacular lienzo. Las santas mujeres le quitan al santo las saetas y proceden a aplicarle el sanador ungüento que llevan en el tarro. En la parte superior izquierda contemplamos a dos angelitos que portan una corona y una palma. La luz crea un espectacular contraste tenebrista que dota de mayor tensión y emotividad al conjunto, resaltando el naturalismo con el que Ribera trata tanto los gestos y las expresiones como los detalles de las ropas o las actitudes. 

Figura en escorzo

En el lienzo de Ribera, los personajes se recortan ante un fondo neutro que impide contemplar cualquier referencia paisajística. El Santo está tumbado, con el brazo derecho aún atado al árbol donde sufrió el martirio, brazo al que dirige su mirada. La figura muestran un sensacional escorzo, adaptándose al reducido marco que les proporciona la tela.

Pierrot

Las criselefantinas Art Nouveau son figuras que suelen representar personajes mitológicos, estereotipos orientales o figuras femeninas tratadas de manera simbolista a medio camino entre el mundo real y el mundo de la fantasía. Entre ellas destaca este Pierrot de otto Hoffman fabricado en 1915 con bronce, marfil y marmol.

Homenaje al cabaret

Detalle del rostro del Pierrot de Hoffman, figura esculpida en honor al mundo del cabaret, y que mide en total unos 33 cm de altura.

El cordero apocalíptico

En el arco triunfal  de la iglesia de San Clemente de Tahull, en Lleida, está representado un Cordero nimbado, en cuya cara se ven mñultiples ojos, consideraod un símbolo apocalíptico. esta pintura fue realizada alrededor del año 1129.

Así se hizo

Para este colosal proyecto, los responsables de Google Art utilizaron la llamada tecnología Picasa. Las cámaras son controladas y multisincronizadas por un sistema de ordenadores que permite ensamblar las miles de fotografías tomadas de cada detalle del cuadro. El resultaod final es una imagen de alta resolución que tiene más de siete mil millones de píxeles.

Real como la vida misma

Con su gran nivel de calidad técnica, Google Art Project permite ver en alta resolución los cuadros del Museo del Prado, o admirar con un ángulo de 360º las pinturas de la Capilla sixtina. Ni visitando dichos lugares en persona, se podría obtener una visión tan detallada de las obras de arte.