Investigadores de la Universidad de Maryland han realizado un hallazgo asombroso, ya que han sido capaces de crear un nuevo tipo de madera tan resistente como el acero. Para ello han utilizado una técnica llamada densificación, consistente en modificar la estructura porosa de la madera natural mediante un baño químico y la presión del calor.

La madera está compuesta de células de celulosa, lignina y hemicelulosa. Hirviendo el material original en una solución de sulfato de sodio e hidróxido de sodio, consiguieron que la celulosa quedara intacta, pero eliminaron parcialmente los otros dos componentes, creando así más espacio en su estructura interior. Luego, presionaron los bloques de madera como si fuera un sandwich a una temperatura de 100 grados centígrados y a una presión de 5 megapascales, durante todo un día, consiguiendo que las fibras de celulosa se entrelazasen entre ellas.

Y el resultado fueron una splanchas 1,5 veces más fuertes que la madera original, y tres veces más densas. Para testar su resistencia, dispararon contra ellas varias balas a una distancia de treinta metros. Y los proyectiles no consiguieron atravesarlas fácilmente. El hallazgo es realmente importante, porque el uso de este nuevo material puede sustituir en algunos casos al acero, cuya producción es una intensa fuente de emisiones de gases a la atmósfera.

Vicente Fernández López