Se llama Essential Phone y ha nacido, según su creador, como alternativa al iPhone. Sin embargo, a primera vista su diseño no tiene nada especial y su precio, 699 €, aunque sí es algo más barato que el del iPhone 7 en sus versiones con más capacidad, es más caro que un Huawei P10, uno de sus competidores Android más directos. Fabricado con una mezcla de titanio y cerámica, tiene una pantalla de 5,7 pulgadas, con resolución QHD y por ahora solo hay una configuración con 4 GB de memoria RAM y 128 GB de almacenamiento.

[image id=»91056″ data-caption=»» share=»true» expand=»true» size=»S»]

Incorpora dos cámaras, una trasera de 13 megapíxeles y otra delantera de 8, con la posibilidad de grabar vídeos en calidad 4K. También incorpora micrófonos con cancelación de ruido, lector de huella digital y conexiones Wifi, NFC y Bluetooth 5.0. En realidad, nada que no ofrezcan otras marcas. Su única novedad absoluta es una conexión magnética trasera para acoplarle una cámara 360 grados o un dock de carga, por ejemplo.

Redacción QUO