«Para 2050, el reto de nuestro equipo será ganar a los Campeones del Mundo de carne y hueso”, afirmaba Shu Ishiguro, director del Laboratorio de Robótica de la Universidad de Osaka (Japón), tras ganar la Robocup en 2010. Este es precisamente el objetivo de los organizadores de esta competición, en la que participan cada año los mejores centros de robótica del mundo. Aunque aún les queda mucho para ganar a nuestros Casillas, Xavi, Iniesta y Puyol.
Los jugadores de los que habla Ishiguro miden 38 centímetros, pesan algo más de dos kilos y se les ha entrenado para jugar al fútbol según el principio de emergencia; es decir, tomando como referencia el movimiento previsible de los que les rodean y teniendo en cuenta no chocar.
Este deporte es un banco de pruebas perfecto para el desarrollo de la robótica, tanto en el plano mecánico como en el de inteligencia artificial.
El campeón de 2011 fue el equipo de la Universidad Virginia Tech, cuyo robot estrella, CHARLI-L2, destacó especialmente por su habilidad para lanzamientos laterales.
Este año, la copa del mundo de robots se celebrará en Mexico DF del 18 al 24 de junio, y en ella competirán unos 200 equipos de distintos países con 800 robots.

Redacción QUO