Hay ideas realmente maravillosas, y esta es una de ellas. El diseñador italiano Carlo Ratti es el creador de este fascinante proyecto. Se trata de un gimnasio flotante que navegará por las aguas del Sena, en París. Tendrá veinte metros de largo y capacidad para unas cuarenta personas. Pero lo más innovador de todo es que se moverá gracias a la electricidad generada por el esfuerzo de quienes estén haciendo deporte en su interior. Todavía es solo un proyecto, pero se espera que esté en funcionamiento dentro de dieciocho meses. Seguro que habrá lista de espera para probarlo.