Son muchos los usuarios de Instagram que cada día recrean su vida en esta red social. En total 400 millones de usuarios que suben casi 60.000 fotos por minuto. Pero para algunos ese mensaje resulta un poco falso o al menos falto de información. Por ello la fotógrafa tailandesa Chompoo Baritone, primero y los británicos de Wren Kitchens después, se unieron a fotógrafos y diseñadores para mostrar el detrás de la escena de Instagram.Esta imagen fue tomada por la bloguera Bridie By The Sea,el día que se decidió, por primera vez, a hornear una tarta junto a su hija.

Manos en la masa

El bloguero Working Family Food,recibió el encargo de cocinar para toda la familia en menos de 30 minutos. Este es el resultado.

Nada es perfecto

«Antes de tener hijos – confiesa la bloguera Budding smiles  –, los imaginaba angelicales y dignos de publicidad. La realidad es muy distinta y cuando preparé pizzas con mi hijo de 2 años, me di cuenta cuan alejada es la expectativa de la realidad. Como en esta foto».

Jardín japonés

Si uno solo ve la imagen enmarcada por la fotógrafa Chompoo Baritone, parece extraída de un catálogo…Pero al ver el panorama real, apenas si parece un antes y un después de las refacciones.

El ladrón de bicicletas

Un parque solitario, un paseo idílico…una mentira enorme producto de la cámara de Chompoo Baritone.

Me pareció haber visto un gatito

Pues sí, allí está el pequeño felino intentando hacerse con el salmón. Claro que en Instagram no aparece.

Isla desierta

Otra imagen de Chompoo Baritone muy alejada de la realidad.»El uso adecuado de filtros puede hacer que una escena cotidiana se transforme en extraordinaria», explica esta fotógrafa tailandesa.

La impostura del pino

Quien está sosteniendo las piernas de la yogui es la autora de muchas de estas imágenes, Chompoo Baritone.

Bajo presión

La bloguera Californian Mum in London, explica que «ser madre ya tiene suficiente presión como para encima agregarle la búsqueda de perfección en las fotos que subo a mi blog. Por eso me sumé a esta iniciativa».

Mi lugar de trabajo

Otra vez Chompoo Baritone recurre a un par de elementos, dos piñas y un globo terráqueo, para escenografiar un espacio que no tiene la paz que pretende transmitir.