El próximo día 26 se cumplirá 30 años de la catástrofe de Chernobyl. Con motivo de ese luctuoso aniversario, el fotógrafo Mark Mervai, ha visitado las ruinas de Prypjat, la ciudad en la que vivían la mayoría de los trabajadores de la central nuclear siniestrada. El desolador testimonio de sus fotos nos hace evocar los relatos del gran libro Voces de Chernobyl, de la escritora bielorrusa Svetlana Aleksiévich. Aquí os ofrecemos una selección de las imágenes que tomó. Son realmente impresionantes. Aunque lo más estremecedor de todo, según el testimonio de Mervai, era el sepulcral y aterrador silencio que reinaba en aquella ciudad fantasma.

Fotos publicadas por cortesía  de Mark Mervai.

Una escuela abandonada

Estas aulas estuvieron llenas de vida hace más de tres décadas.

Máscaras antigas

Más de tres mil unidades. Todas ellas de tamaño infantil.

Un lugar desolador

El esqueleto de un viejo televisor permanece en pie como testiomonio de que aquí hubo vida.

El emblema soviético

La piscina local

En la que llegaron a entrenarse algunos futuros atletas olímpicos.

Una terraza con vistas… a la nada

Los restos de la desbandada humana

El silencio ominoso es el único amo de la ciudad