El metro siempre ha sido un lugar singular. Uno de los paisajes urbanos por excelencia, convertido en escenario de numerosos thrillers setenteros y ochenteros. Pero estas magníficas fotos de Albert Dros, tomadas en la red del suburbano de Copenhague, nos lo muestran de una forma diferente. Casi como si fuera una experiencia lisérgica y lo visitásemos puestos hasta arriba de ácido o de alguna otra sustancia similar.
Más en Quo
Mobility City, un año mostrando la movilidad del futuro
Mobility City, el primer Museo Tecnológico de la Movilidad del mundo ubicado en Zaragoza, cumple un año Imagina un pabellón futurista que da la impresión de que una nave espacial ha aterrizado tendiendo un puente entre las dos orillas de río Ebro. Ahora imagina que en ese pabellón tienes acceso a un museo interactivo donde […]
Los pasos diarios que necesitamos para compensar las horas de estar sentados
Los científicos revelan el número óptimo de pasos diarios para compensar una vida sedentaria, y no son los que dice tu pulsera de actividad
La peligrosa moda de esnifar cacao
Pocas personas pueden resistirse al sabor del chocolate, sin embargo, una nueva tendencia hace que la gente disfrute de este producto de una forma muy distinta y peligrosa
Los gusanos microscópicos de Chernóbil que resisten a la radiación
Los gusanos microscópicos que viven en el entorno altamente radiactivo de la Zona de Exclusión de Chernóbil (ZEC) parecen hacerlo completamente libres de daños por radiación