El Harlem de los años 70 y principios de los 80 fue un lugar mítico, para lo bueno y para lo malo. Había paro, pobreza y violencia, pero también alegría y ganas de vivir y superarse. Y la estética que acuñaron sus habitantes ha pasado a la historia. Todos hemos visto dicho barrio inmortalizado en películas cómo Shaft o Superfly. Y ahora podemos volver a visitarlo gracias a estas magníficas fotos tomadas en aquella década por el fotógrafo francés Jack Garofalo.