Hasta ahora casi nadie recurría a un fisioterapeuta especializado en gimnasia uroginecológica por un problema sexual, y menos para mejorar su rendimiento en la cama. Esto, sin embargo, empieza a cambiar. De la mano del doctor belga Marcel Caufriez está entrando en España la gimnasia hipopresiva sexual, técnica que, según Julene Irazu, fisioterapeuta especialista en uroginecología, permite tomar el control de la sexualidad y de la calidad de nuestros orgasmos, y fortalecer las erecciones.

Ejercicios para alcanzar el orgasmo más deprisa

Sus rutinas están programadas para tener una respuesta hormonal. “Esta gimnasia”, explica Irazu, “activa la dopamina, hormona encargada de la excitación y el placer, lo que nos hace sentir bien, felices y positivos. Esto, junto a los beneficios conseguidos a nivel postural y de calidad del tono de la musculatura de la pelvis, hace que nos haga ser más sensibles al tacto, que nuestros sentidos estén más despiertos y generen aún más dopamina para incrementar el placer. Todo ello hace llegar al orgasmo en un tiempo más reducido y con más intensidad en el caso de las mujeres, y una satisfacción más plena en el de los hombres, ya que la erección es más completa y mantenida en el tiempo”.

El ejercicio que se realiza durante el coito equivale a media hora intensa de bicicleta

La gimnasia hipopresiva empieza con varias sesiones, primero individuales y después grupales, para el aprendizaje de las técnicas y las posturas. En ellas se fortalece las cavidades abdominal y torácica, y el suelo pélvico, de manera que el tono muscular aumenta un 58%. “Transcurridos unos seis meses, se incorporan niveles superiores con los cuales se consigue un efecto fisiológico mayor, mejor capacidad pulmonar y fuerza explosiva”, explica esta profesional. Son movimientos muy estudiados, y su práctica requiere el estricto control de un entrenador cualificado. El resultado es un cuerpo activo, ágil y con el apetito erótico despierto y bien preparado para un extraordinario rendimiento físico, mental y sexual.

Pero este mismo efecto puede conseguirse con cualquier otro tipo de entrenamiento que active la circulación sanguínea. El simple hecho de caminar erguido es un buen aliado para conseguir buen tono muscular en la faja abdominal. Como consecuencia, las contracciones del útero durante el orgasmo se intensifican y aumenta la sensación de placer.

Son muchos los ejercicios que tonifican el cuerpo, aportan sensualidad y mejoran la circulación por la región pélvica estimulando la libido. En tres o cuatro semanas, la vida sexual gana un plus de variedad y plenitud. La danza del vientre, por ejemplo, es una magnífica gimnasia sexual. Con ella se trabajan pies, piernas, glúteos, abdomen, caderas, caja torácica, brazos, hombros, cuello… Sus movimientos pélvicos y abdominales actúan de manera especial sobre los órganos sexuales de la mujer (útero y ovarios), además de fortalecer el sistema nervioso y desarrollar habilidades de seducción y de conocimiento de nuestro cuerpo.

Quemar calorías evita el ‘gatillazo’

También los ejercicios de Pilates son el preludio de una sesión de sexo donde no se escatimará ninguna posición sexual. Aparte de trabajar esos músculos, mejoran la resistencia y la flexibilidad. Cualquier ejercicio físico que eleve nuestro nivel cardíaco, como el footing y la natación, facilita el flujo de sangre y una recarga de testosterona y endorfinas. Las culturas tailandesa e indonesia proponen una combinación de ejercicios de taichi y aeróbicos para controlar y potenciar el orgasmo. Los más eficaces son los que trabajan abdomen, pelvis, glúteos, cintura y vagina, aunque no hay nada mejor que los estiramientos para exhibir mayor versatilidad en la cama.

Ya hay varias investigaciones que atestiguan el impacto positivo del ejercicio físico para la actividad sexual. Una de ellas, liderada por la investigadora Carol A. Derby, del Instituto de Investigación de Massachusetts, comprobó que los hombres que queman unas 200 calorías diarias practicando alguna actividad física tienen menos riesgo de padecer disfunción eréctil. Otro estudio en la Universidad de California concluyó que una hora de ejercicio tres veces por semana aporta orgasmos más frecuentes y duraderos.

Por si todas estas razones no fuesen suficientemente convincentes, hay otra igualmente persuasiva: un cuerpo bien moldeado, con unas nalgas fuertes y un pecho firme, gana atractivo y sex-appeal. ¿Merece la pena perderse este extra de sensualidad o abandonar prematuramente por pereza o agotamiento?

El músculo pélvico en forma

Ejercitar con regularidad dicha área tiene placenteros beneficios para ambos sexos: a las mujeres las vuelve más sensibles y a los hombres más resistentes

Ellas

Las mujeres con buena musculatura sexual controlan la penetración con movimientos alrededor del pene.

Algunos ejercicios, como la gimnasia abdominal hipopresiva, devuelven el tono muscular a las mujeres que padecen debilidad del suelo pélvico, que dificulta el coito y la introducción del pene.

Las bolas chinas y conos vaginales, que se introducen en la vagina, son recursos terapéuticos cada vez más frecuentes.

Hay un ejercicio muy simple que se puede practicar en cualquier parte: apretar los músculos de la vagina cinco veces al día.

Las mujeres son mucho más receptivas al sexo después de haber realizado veinte minutos de ejercicio vigoroso.

Y ellos

Para el hombre, la penetración es mucho más placentera si la mujer tiene una buena musculatura vaginal.

Los ejercicios de suelo pélvico activan la circulación en toda la zona genital, aumentan su vigor y resistencia, y son la clave para mejorar el mantenimiento y la rigidez de la erección.

En hombres, el ejercicio intenso incrementa los niveles de testosterona, la hormona indispensable para la calidad sexual.

La masturbación es un momento estupendo para realizar los ejercicios de contracción y relajación.

El movimiento y las sensaciones que percibe el cuerpo agregan erotismo, una cualidad a menudo descuidada por el hombre.

Entrenamientos para liberar energía sexual

Pilates. Tumbado boca arriba, levanta una pierna y acércala a la cabeza manteniéndola recta. Luego, cambia de pierna.

Entrenamientos para liberar energía sexual

Yoga. Sentado en el suelo, atrae los pies hacia la entrepierna, bajando las rodillas hacia el suelo pero sin forzar los músculos.

Entrenamientos para liberar energía sexual

Danza del vientre. Flexibiliza el cuerpo y aporta sensualidad. Sus movimientos, aplicados en el sexo, aumentan el goce.

Entrenamientos para liberar energía sexual

Gimnasia hipopresiva. Con movimientos lentos, los abdominales hipopresivos reducen la presión del abdomen.

Entrenamientos para liberar energía sexual

Ejercicios de Kegel. Tumbado boca arriba, con las rodillas flexionadas y los pies apoyados, contrae los músculos del suelo pélvico.