La medida de todas las cosas

Aparentemente, la evolución decide el tamaño del pene a dedo. Literalmente. Hasta ahora, las posibilidades de determinar la longitud del miembro viril masculino a ojo eran cuestión de leyendas urbanas: que si una nariz grande, que si un pie excesivo, que si estaba inversamente relacionada con la altura… Un grupo de urólogos coreanos ha tomado el toro por las astas y ha resuelto el dilema. La respuesta está en la relación entre el dedo anular y el índice de la mano derecha: cuanto más largo es el primero respecto del segundo, mayor la longitud del pene. Esto tendría que ver con las hormonas sexuales masculinas, andrógenos, claves para el desarrollo del órgano. Durante la gestación, estas hormonas elevan sus niveles hasta alcanzar su máximo entre las semanas 14 y 16. Una alta concentración hormonal supone mayor actividad testicular. Pero al mismo tiempo, los andrógenos también se relacionan con la formación
de, por ejemplo, los dedos.
De ahí la relación. Por ahora, el estudio no es definitivo, ya que solo se realizó con voluntarios asiáticos, una población que, como promedio, tiene penes más pequeños que el resto.

Una planta con ‘planta’

Se podría decir que se trata del pene más grande del reino vegetal. El aro gigante, Amorphophallus titanum, es más conocida como la flor pene, por su obvia forma o también como la flor cadáver, por el olor que desprende con el objeto de atraer insectos para ser polinizada. Se caracteriza, así mismo, por su floración. Esta ocurre solo 3 o 4 veces durante los cerca de 40 años que vive la planta. Una vez alcanzada su máxima altura, que puede sobrepasar los tres metros, la flor muere a los 3 días. La especie es originaria de Indonesia.

El PIB y el tamaño

Es el propio Tatu Westling, investigador de la Universidad de Helnsinki, Finlandia, quien confirma que el estudio comenzó en parte como una broma. La investigación a la que se refiere pretendía buscar una relación entre el crecimiento o descenso del producto interior bruto de un país y el tamaño del pene en erección de sus habitantes. Así, después de analizar el PIB y los órganos viriles de 121 países, la relación, increíblemente, apareció: “El tamaño del órgano masculino tiene una relación inversa con el crecimiento del PIB: a mayor crecimiento, menor tamaño. Y viceversa”. Lo que no se sabe es si la crisis económica en la UE producirá un aumento de pene.

Diseño inteligente

La forma del pene humano es una curiosidad en el reino animal; ya no solo por su tamaño (casi el doble de nuestro pariente primate más cercano), sino por su “diseño”. El psicólogo evolucionista Gordon Gallup, de la Universidad de Albany,Nueva York, sostiene que tanto el tamaño como la forma del glande tienen el propósito: sacar de la vagina el semen de los competidores y garantizarse la permanencia de los genes propios.

Un castigo que… ¡duele!

En Bangladésh, un hombre de treinta años fue castigado por un jurado popular a llevar colgando de su órgano viril un ladrillo. La sentencia se debía a que el hombre había secuestrado y luego se había casado con una menor. Aunque parezca increíble, hay quienes venden una técnica similar para alargarse el pene. Colgarse pesas del miembro puede producir lesiones dérmicas en los nervios y en el área circulatoria. Pese a anuncios y foros, no es un sistema seguro: el pene no es un músculo, y el tejido que se estira con métodos como este puede perder sus cualidades y ocasionar pérdidas de sensibilidad o acabar produciendo impotencia permanente.

Circuncisión y VIH

Un estudio realizado en Uganda por el microbiólogo Lance Price, del Instituto de Investigación Genómica de Arizona, demostró que la circuncisión reduce en un 50% los riesgos de contraer sida. La investigación se realizó también en Sudáfrica y Nueva Zelanda, y obtuvo resultados similares. La razón de esto, según Betty Donoval, epidemióloga de la Universidad de Illinois, es que el VIH infecta leucocitos específicos que se encuentran en el interior de la mucosa de la piel de los no circuncisos. Estos leucocitos no están presentes en la piel de aquellos que sí están circuncidados. Los leucocitos son los encargados de la respuesta inmunitaria del cuerpo.

El primero de todos

Hace 425 millones de años, el Colymbosathon ecplecticos (nadador con gran pene) surcaba los mares de la Tierra. Se trataba de un artrópodo de 5 mm cuyo pene llegaba a medir el 20% de su tamaño corporal: 1 milímetro. Su estudio demuestra irrefutablemente que los artrópodos se reproducían sexualmente. Este pequeño bicho es el dueño del pene más antiguo del que se tenga registro. El fósil ha sido descubierto en Inglaterra, y su estudio ha permitido descubrir su pene, los intestinos y el ano.

Más vale que sobre

Los lagartos y las serpientes tienen una difícil decisión cada vez que encuentran pareja: qué pene usar. Estos reptiles están dotados con dos penes, el derecho, ligado al testículo derecho y el izquierdo, al testículo restante. Para decidir cuál usar deben recordar con cuál tuvieron su última aventura, de modo que usen el que tenga más reserva de semen, con el objeto de aumentar la posibilidad de fecundación. El período más efectivo para cambiar de pene es cuando la relación anterior fue en un lapso menor a 24 horas, descubrieron dos biólogos de la Universidad de Miami: Richard Torkaz y Joseph Slowinski. Tener dos penes es una estrategia evolutiva que responde a la competencia espermática: si hay muchos machos y pocas hembras, hay que tratar de inseminar a la mayor cantidad posible de ellas, de la manera que sea.

Aquí está todo expuesto

Este museo islandés probablemente sea uno de los más raros del mundo: se trata del Museo Falológico. En total hay expuestos 276 miembros, que incluyen toda la fauna mamífera de la isla y un molde con el órgano de los 15 miembros del equipo islandés de balonmano que logró la medalla de plata en los Juegos Olímpicos de 2008, en Pekín. Su director, Sigurdur Hjartarson, reconoce que una de sus piezas favoritas es el del cachalote: mide 1,70 m y pesa 70 kilos. “Y solo es la punta”, aclara.

Que el alma de Tutankamón no pene

Hace aproximadamente un año, el pene del faraón egipcio más famoso fue objeto de controversia y polémica. Había desaparecido; luego se encontró en el sarcófago; más tarde se dijo que siempre había estado allí… Nunca se sabrá qué ocurrió exactamente, pero lo que sí podemos conocer es que su órgano viril podría dar la clave de por qué murió. Por ahora, la especulación más aceptada es que sufría de un desorden genético que le hacía crecer las mamas y le alargaba el cráneo: de ahí la representación que se hace de la familia de Tutankamón en los murales: cuerpos femeninos y cráneos alargados. Algunos científicos, como Zahi Hawass, aseguran que esto debería haber influido en el tamaño del pene del faraón, algo que no sucede en absoluto, según sus palabras.

El reino de la asimetría

El mundo de los insectos se caracteriza, en general, por una particularidad única: la simetría. El lado izquierdo es un espejo del derecho, tanto en el exterior como en la ubicación de los órganos internos…Pero esto no ocurre con el pene de muchos de ellos. Lo llamativo es que, en general, las hembras favorecen siempre la simetría, en todas las especies.
¿Qué podría ocurrir, entonces, para que los genitales masculinos de muchos insectos hayan evolucionado de forma asimétrica? La respuesta la dio el experto en estadísticas biológicas de la Universidad de Amberes, Stefan Van Dongen. Según él, la asimetría es la solución evolutiva a una disparidad presente también en las hembras: algunas tienen la cloaca en un lado del cuerpo y resulta más fácil acceder a ellas desde allí.

El secreto perdido de las aves

En la actualidad, solo un 3% de las aves tiene pene. ¿Cuándo lo perdieron? Y más importante aún: ¿por qué? Los biólogos asumían que debía haber una ventaja evolutiva que compensase a las aves haber “abandonado” su órgano en el pasado remoto. James Briskie, de la Universidad de Canterbury, y Robert Montgomerie, de la Queen’s University de Canadá, han encontrado la respuesta: las culpables son las hembras. Actualmente, la mayoría de las aves se reproducen por el “beso cloacal”: macho y hembra unen sus cloacas y el primero deposita el esperma. Es tarea de la fémina impulsar el esperma hasta el final, para que la fecundación se lleve a cabo. La estrategia tiene la gran ventaja de que permite a la hembra disfrutar del sexo y, al mismo tiempo, decidir el esperma de qué macho quiere llevar a buen término. Rechazar huevos fertilizados resulta una estrategia demasiado costosa. Pero resulta una curiosa coincidencia que, en las aves que sí tienen pene, los huevos que ponen las hembras son pequeños y el coste de no fertilizarlos no es tan grande.

No piensas con él, pero lo tienes aquí

Durante casi un siglo, desde 1920, los científicos buscaron el área del cerebro relacionada con el pene. La búsqueda estaba ligada con la construcción del Homúnculo: un mapa de las partes de nuestro cuerpo en el cerebro. Pero ha sido recientemente cuando Christian Kell, del Departamento de Neurología de la Universidad Goethe (Alemania), lo ha encontrado. El estudio que lo permitió analizó mediante un escáner cómo el cerebro de ocho voluntarios procesaba estimulos realizados con un pincel en el pene. En el mapa de nuestro cuerpo en el cerebro, el miembro, según Kell, está ubicado entre el abdomen y los dedos de los pies. Pero, para su decepción, el sitio que ocupa es mucho más pequeño de lo que se pensaba. Habrá que conformarse.