Lorena Valencia, científica de la Universidad de Granada, ha analizado y digitalizado la información facial de 33 cadáveres y 154 sujetos vivos.

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Su estudio permite determinar parámetros como la correspondencia entre el cráneo y el rostro del individuo, y establecer la profundidad del tejido blando facial en las poblaciones meridionales.

El objetivo es que en el futuro toda esa información pueda utilizarse en investigaciones policiales para realizar, mediante gráficos computerizados tridimensionales, recreaciones de caras de cadáveres sin identificar y en estado de descomposición.

Redacción QUO