Ahora que se está debatiendo sobre la posibilidad de acabar con el cambio de hora y que, además, nuestro país cambie su huso horario para adoptar el de Inglaterra y Portugal, no está de más recordar que en España no existió un horario oficial unificado en toda la península hasta que comenzó el siglo XX.

En siglos pasados, cada territorio peninsular se regía por la hora solar. Posteriormente, se fue implantado el llamado horario civil, por el cual cada región se ajustaba a su hora solar media. Así, entre las horas de A Coruña y Girona había 50 minutos de diferencia. Y mientras en Barcelona eran las 12 del mediodía, en Madrid eran algo más de las 11:30.

La aparición del ferrocarril en el siglo XIX obligó a intentar unificar esa disparidad de horarios, y se estableció la llamada hora oficial que se regía por el Meridiano de Madrid. Aunque solo se aplicaba al tráfico de trenes, ya que cada ciudad seguía guiándose por su hora local.

Fue finalmente el 1 de enero de 1901 cuando se unificaron todos los horarios vigentes en el territorio español, y se adoptó una hora oficial única acorde con la del la del Meridiano de Greenwich. En aquellos tiempos las islas Canarias tenían la misma hora que la península, lo que se mantuvo hasta el año 1922.

Redacción QUO