Un total de 236 capítulos. Ni uno más, ni uno menos. Esa es la cantidad de episodios que dedicó la escritora británica de novela romántica Kit Lovelace a comprobar quién era el más adicto a la cafeína dentro de la serie. Es una de las “frikadas” que no todo el mundo está dispuesto a hacer por una serie, pero esta es si sin duda, una de nuestras favoritas que ha hecho alguien en los últimos años.

La de horas que pasaron Mónica, Phoebe, Rachel, Ross, Chaendler y Joey sentados en los sofás del “Central Perk” (extrañamente siempre libres) frente a una taza de café. En cierta forma, este brebaje ha sido siempre un elemento más dentro de la trama. Así que, qué mejor ideas que calcular cuál ha sido su protagonismo. Rescatamos este tweet de 2017 en el que hablaba del tema.

Como podéis comprobar la más adicta fue Phoebe con 227 tazas de café, seguida por Chaendler, con 212. Le siguen a un poco de distancia Mónica, con 198 cafés, Joey con 191, Ross con 188 y Rachel con 138 (quizá, como ella tuvo que trabajar en el bar durante un tiempo, no tenía permitido consumir tanto como quisiera.

También calculó el dinero invertido en 10 temporadas y el resultado es de cerca de 2000 dólares en total, siendo Phoebe la que más llegó a gastarse, unos 408 dólares. Por si fuera poco, le dio tiempo a analizar cómo evolucionó esa “adicción” con el tiempo, y Chaendler pareció tener más afición a desconectar con un cafelito al comienzo de la serie, pero con el paso de las temporadas lo dejó aparcado a un lado. Aquí tenéis el gráfico que lo refleja.

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Alberto Pascual García