En 1945 se descubrieron en un lugar de la ribera del Nilo los llamados Manuscritos de Nag Hammadi. Se trata de trece códices de piel que incluyen más de 50 textos, cuya antigüedad aproximada es de unos 1.400 años. Dichos textos fueron escritos por los coptos, la primera comunidad cristiana de Etiopía y Egipto, y permetencer al gnosticismo, una corriente herética del pensamiento cristiano.

Y, ahora, investigando dichos documentos, un equipo de la Universidad de Texas ha descubierto algo que había pasado desapercibido. Uno de dichos textos es una copia de otra. Está escrita en griego y de una forma más sencilla que el original. Los investigadores creen que se hizo con una finalidad didáctica, para hacer su contenido más accesible a los profanos.

Y se da el caso de que en dicho texto se dice que Jesús conversa con Jaime, al que se refiere como su hermano. La posible existencia de Cristo como personaje histórico no está corroborada por suficientes evidencias. Pero, entre quienes si la dan por hecho, hay una corriente que asegura que Jesús tuvo otros hermanos, algo que es considerado herejía por el catolicismo, ya que contradice el dogma de la virginidad de la madre de Jesús.

De cualquier forma, y sin entrar en esa polémica que solo incumbe a las corrientes de pensamiento religioso, los investigadores de Texas, dicen que en este caso dudan mucho de que el texto se refiera a un hermano carnal. Explican que en la tradición gnóstica era frecuente referirse a los compañeros con la expresión hermano.

Fuente: ScienceAlert.

Vicente Fernández López