¿Qué hace el cadáver de un tiburón en una carretera a diez kilómetros de la costa? ¿Cómo ha llegado hasta allí? Esa fueron algunas de las preguntas que, seguramente, se hicieron los habitantes de la pequeña localidad de Ayr, en Australia, cuando descubrieron a este escualo muerto.

Obviamente, los tiburones no andan, aunque algunos podrían pensar que llegó volando como en la delirante película Sharknado. Pero lo cierto es que tampoco parece que fuera así.

Lo que ha ocurrido realmente es que el ciclón Debbie que recientemente golpeó la costa Australiana, provocó olas de gran tamaño que, en ocasiones, penetraron varios kilómetros tierra adentro. Y lo más probable es que fuera una de ellas la que arrastrara al animal.

Fuente: ScienceAlert.

Vicente Fernández López