Un equipo de genetistas de la Universidad de Leicester (Reino Unido) han descubierto que la mayoría de los hombres europeos descienden de sólo «un puñado» de antepasados de la Edad de Bronce. Los investigadores analizaron las secuencias de ADN de una gran parte del cromosoma Y, que pasa exclusivamente de padres a hijos, de 334 hombres de diecisiete poblaciones de Europa. Y lo que encontraron fueron tres ramas muy diferenciadas de este cromosoma en el 64% de los varones que participaron en el estudio, cuyos resultados se han publicado en la revista Nature communications.

Cada una de esas ramas corresponde a una mutación. Según los autores del estudio, la primera de ellas pudo producirse hace unos cinco mil años entre los habitantes de Noruega. La segunda, hace unos cuatro mil, afectando a pobladores de España, Italia, francia e Inglaterra. Y la tercera hace unos tres mil, en Hungría, Dinamarca y Francia.

Las fechas corresponden a la llamada Edad de Bronce, un período en el que, según los datos disponibles, la población mundial disminuyó de forma notable. La conclusión que extraen los especialistas es que, aproximadamente, dos tercios de los europeos actuales descienden de tres varones de aquel período, con bastante probabilidad líderes o caudillos de sus respectivos grupos.

A tenor de esta noticia hay que recordar que otra investigación genética realizada en 2006 reveló que en el mundo existían unos dieciséis millones de personas que eran descendientes del conquistador mongol Gengis Khan.

Redacción QUO