16.- Una lesbiana pueden ser “reconvertida’. Algunas personas creen que una mujer elige ser homosexual como resultado de una mala experiencia con un hombre y que si topase con un buen amante, se “reconvertiría” a la heterosexualidad. La homosexualidad no es como apuntarse a un club social: es una orientación sexual, es química, emociones, sentimientos…
17.- Una mujer utiliza juguetes eróticos cuando está insatisfecha con su pareja. Este mito es la consecuencia de la importancia social que le damos al falo como único responsable del placer; sin duda, una visión reduccionista del sexo y un inconveniente añadido al ritmo de vida que llevamos, en el que relegamos las relaciones sexuales al último momento del día, cuando estamos más cansados. La utilización de juguetes eróticos puede aumentar la parte lúdica de la relación sexual y poner un punto de improvisación e imaginación en los encuentros.
18.- Si no tiene orgasmos, es frígida. La frigidez es un término arcaico que no define nada en concreto y hace referencia a todas las disfunciones sexuales femeninas como si fueran la misma. No siempre se llega al orgasmo durante el coito, y eso no significa que una mujer no haya sentido nada o no haya disfrutado de ese contacto sexual. Por otra parte, ellas pueden llegar al clímax con otras prácticas sexuales que no sean la penetración. Solo si no se alcanza en ninguna situación, se podría hablar de anorgasmia.

Redacción QUO