Parece ser que las famosas algas mágicas Gyllyweed –o Branquialgas en su traducción al español– que hacía que a los personajes de Harry Potter les crecieran branquias para respirar bajo el agua, no pudiera ser tan imposible.

Investigadores de la Universidad de Dalshousie de Halifax (Canadá) han descubierto una forma en la que quizás podríamos respirar bajo el agua mediante la fusión de nuestro ADN con el de las algas. El grupo de científicos, liderados por Ryan Kerney, observaron que existen algunas algas que invaden a los embriones de la salamandra, lo que supone un hallazgo único de una relación intracelular entre los vertebrados y las plantas marinas.

La investigación1, publicada en la revista Proceedings of the National Academy of Sciences (PNAS), señala que la relación intracelular podría haberse dado en el momento en el que las salamandras ponen sus huevos en las concentraciones de agua, dado que las algas entran en los embriones antes de que estos desarrollen su sistema inmune. También se detectó un número inferior de células de algas en fases posteriores de la larva, pero al final, las pruebas revelaron que había contenido de ADN de algas en los tractos reproductivos de algunas salamandras adultas. Esto sugiere a los científicos que las algas podrían también transmitirse a los descendientes próximos.

Este descubrimiento permite creer que las algas pueden llegar a vivir dentro de los tejidos de vertebrados y además, que podría llegar a existir un tipo de asociación similar en otras especies. Las algas también saldrían ganando con esta curiosa relación según el equipo de investigadores, ya que podrían beneficiarse de aquellos residuos ricos en nitrógeno que emiten los embriones. Por su parte, y en complementación de esta curiosa simbiosis, los embriones también se beneficiarían del oxígeno producido por las algas.

1.- Ryan Kerney, Eunsoo Kim, Roger P. Hangarter, Aaron A. Heiss, Cory D. Bishop, & Brian K. Hall (2011). Intracellular invasion of green algae in a salamander host Proceedings of the National Academy of Sciences : 10.1073/pnas.1018259108

Redacción QUO