Su misión inicial fue más práctica que estética –al fin y al cabo, la biomédica asegura que el culo ayuda a equilibrar la geometría corporal cuando nos movemos–, pero ha terminado convirtiéndose en objeto de culto y dando vida a una obras de alto contenido erótico. The BigButt Book (Ed. Taschen) reúne 400 fotos tomadas desde 1900, algunas de culos tan suntuosos como el de Serena Williams y otros tan pequeños como el de Pamela Anderson. Todo un homenaje a Venus Calipigia, la diosa de las bellas nalgas, a la que dos hermanas erigieron un templo para agradecerle su hermoso trasero.
Redacción QUO
