Comer es una actividad que en muchas ocasiones está vinculada a la vida social. Por eso, hacerlo solo de forma habitual puede resultar un poco triste y, además, también puede tener consecuencias negativas para la salud. Un estudio realizado con 8.000 adultos por un equipo del Oxford Economics and the National Centre for Social Research, en Reino Unido, ha revelado que comer solo puede estar vinculado a un mayor riesgo de padecer sobrepeso, depresión y síndrome metabólico. Pero, ¿por qué?

Las causas pueden ser muy diversas. Según los autores del estudio, hay personas a las que les gusta comer mucho pero, en presencia de otros, se muestran más comedidas. Aunque cuando están solas no tienen reparo en dar rienda suelta a su apetito. Además, si esa soledad no es deseada puede generar ansiedad, lo que acaba provocando que la persona coma más cantidad y además de alimentos menos saludables.

Por supuesto, este estudio tiene sus limitaciones. No es lo mismo que una persona coma sola porque así lo ha elegido, que cuando esa soledad es impuesta. Además, hay que tener en cuenta otros factores como los socioeconómicos, que en esta ocasión no han sido valorados.

Pero los resultados son bastante interesantes, e indican que de vez en cuando no está mal sentarnos con alguien a la mesa para compartir el almuerzo o la cena.

Fuente: The Guardian.

Vicente Fernández López