Un viejo conocido podría ayudar a combatir el parkinson. Se trata de un antidepresivo con más de 50 años de historia, la nortriptilina, y un estudio pone de manifiesto que puede retrasar la progresión de esta enfermedad degenerativa.

El parkinson es una enfermedad para que actualmente no existe cura. Causa rigidez muscular, temblor en reposo y lentitud de movimientos. Además se puede acompañar de síntomas no motores, como la alteración cognitiva o los trastornos del estado de ánimo.

“La depresión es una enfermedad que se asocia muy frecuentemente al parkinson, así que nos preguntamos si un antidepresivo podría modificar su progresión”, comenta Tim Collier, autor del estudio que se publica en Neurobiology of Disease. La nortriptilina es un antidepresivo tricíclico y también se usa en el tratamiento del dolor neuropático.

El estudio demuestra que la nortriptilina hace descender los niveles de alfa-sinucleína en cultivos de células con parkinson. Esta sustancia es una proteína con una configuración defectuosa que se encuentra en los pacientes con esta enfermedad neurodegenerativa y que está implicada en la génesis de esta dolencia.

Redacción QUO