A sus 26 años, el estadounidenses Dallas McCarver era una estrella en el mundo del culturismo, pero ha fallecido mientras cenaba en su casa. Y la causa no fue otra que atragantarse con un trozo de carne. Puede parecer algo anecdótico, pero esta forma de morir es más común de lo que se cree.

Según cifras facilitadas por la Fundación Mapfre en 2016, en escapa mueren al año unas 1.400 personas por esta razón. Y, en Estados Unidos, algunos estudios sitúan las muertes causadas por atragantamiento por encima incluso de los suicidios.

Entre los niños, las causas de atragantamiento más comunes son tragarse canicas u otro tipo de objetos, aunque también se dan casos provocados pro la comida. Los alimentos que provocan más atragantamientos infantiles son los frutos secos, las salchichas, los caramelos, los chicles, la zanahoria y la manzana crudas, la carne y las espinas de pescado. En cambio, entre los adultos, la carne es la principal causante de este problema.

El atragantamiento se produce cuando intentamos tragar algo demasiado grande para pasar a través de la traquea, lo que provoca que se quede atascado, impidiendo respirar. Si la persona puede toser se considera que la obstrucción no es total, y el objeto atragantado se puede expulsar tosiendo con más fuerza o dando unos golpes en la espalda del afectado.

Pero si no es así conviene actuar y pedir ayuda o, si se tienen conocimientos de primeros auxilios aplicar la llamada maniobra de Heimlich. Los especialistas consideran que las vías deben liberarse en un plazo que no exceda los cuatro minutos para evitar desenlaces como el de Dallas McCarver.

Vicente Fernández López