Según un informe publicado por la Asociación Británica de Cirujanos Plásticos Estéticos (BAAPS), la cirugía estética en Inglaterra está cayendo en picado. Frente a un repunte en 2015 tras los malos tiempos de la crisis económica, en el año 2014 este tipo de operaciones cayeron un 40% en Gran Bretaña.

El lifting de cara y cuello se redujo en un 53%, de 6.402 en 2015 a 3.423 en 2016. La cirugía de párpados se solicitó un 38% menos y los procedimientos cosméticos para hombres y mujeres cayeron por debajo de 31.000, la cifra más baja registrada desde 2006.

Según BAAPS, las opciones menos invasivas y no quirúrgicas como los peelings químicos y la microdermoabrasión están tomando el relevo de la cirugía estética tradicional. Pero como veremos un poco más adelante, no debemos caer ante las bondades del marketing.

¿Y en España?

Tras leer estos datos, en QUO nos preguntábamos cómo era la situación nacional. Para saber más al respecto hemos hablado con el doctor Gustavo Sordo, cirujano plástico estético y miembro de la junta directiva de la Asociación española de cirugía estética plástica (AECEP). En España, «desde el punto de vista general es más frecuente la cirugía corporal que la facial«. Según reconoce el cirujano, «como consecuencia de la crisis económica, los tratamientos de cirugía estética descendieron en 2008 alrededor de un 30% y un 40%». Pero, aunque no hay datos actualizados oficiales desde 2014, «la impresión generalizada de los socios de la asociación es que ahora está habiendo un repunte y una demanda creciente«.

Gustavo Sordo considera que con el surgimiento de técnicas no invasivas, es probable que la cirugía plástica facial haya descendido. Ante lo que alerta que la mayoría de ellas «no son sustitutivas, sino complementarias«. Un lifting, una blefaroplastia, una otoplastia o una rinoplastia no pueden sustituirse con tratamientos estéticos. «Lamentablemente, nos encontramos con publicidad engañosa que asegura que sí se puede, pero no es cierto».

Los tratamientos faciales no invasivos pueden ser positivos para aportar volumen a los labios, pómulos o corregir las arrugas de expresión. Tratamientos con hilos tensores o peelings que barren la capa superficial de la piel pueden ayudar en algunos casos, pero «no son antagonistas, sino complementarios a la cirugía estética».

España, líder en cirugía estética

Según nos confirma Gustavo Sordo, España lleva muchos años siendo líder en cirugía estética y reparadora. Las operaciones más demandadas son la liposucción y el aumento de mamas.

Además, también es donde más expertos hay, con cifras de «un cirujano plástico por cada casi 50.000 habitantes, lo que nos sitúa en el Top-5 de la clasificación global». El doctor Sordo también recalca que el nivel formativo de los profesionales españoles es uno de los más altos que hay en el mundo, ya que dedican entre once y doce años a formarse en este área. Nada que ver con los llamados cirujanos cosméticos, ante los que advierte tener especial cuidado.

Además, según el cirujano, «hay un gran número de pacientes británicos que vienen a operarse a España. Y todo porque el nivel de la cirugía estética en nuestro país es muy alto».

Redacción QUO