Algunos de los descubrimientos más rompedores de la historia de la medicina se han publicado en la revista médica británica The Lancet. Sus artículos han desvelado las claves para entender la enfermedad de las vacas locas, cómo la talidomida provoca malformaciones congénitas, por qué los hospitales deben tener un rígido protocolo antiséptico y, desde ahora, por qué España es el séptimo país más sano del mundo.

El resultado se desprende de un análisis de 33 indicadores de salud, en 188 países, que la revista publicó ayer. España obtuvo una puntuación de 82 sobre 100, la misma que han recibido Reino Unido, Finlandia y Holanda, y solo un punto por debajo de Andorra.

España destaca por tener la tasa de suicidios más baja entre los 13 primeros clasificados, y la segunda mejor puntuación en violencia de género de los 16 primeros. Solo Islandia, que encabeza la lista con 85 puntos, saca mejor nota en la tasa de mujeres mayores de 15 años que han sufrido malos tratos a manos de sus parejas.

El análisis ha revelado que el sobrepeso es el punto débil de la salud española; España tiene el peor resultado entre los 52 primeros países de la lista. El abismo entre sus 33 puntos y los 62 de Singapur, el segundo país más sano, indica dónde está la barrera que impide que España suba escalones en esta importante clasificación. El consumo de alcohol y el tabaquismo también son asignaturas pendientes. Eso sí, la tendencia del país es muy positiva: España solo alcanzó la decimoquinta posición en el 2000.

Los criterios para dibujar este panorama de la salud mundial están marcados por la Organización de Naciones Unidas (ONU). En concreto, están plasmados en una serie de indicadores con los que la ONU evalúa la trayectoria de los distintos países hacia sus Objetivos de Desarrollo Sostenible. La organización aspira a que, para 2030, la violencia de género se haya erradicado por completo, el número de accidentes haya descendido a la mitad, la cobertura médica sea universal y la epidemia de obesidad se haya controlado.

Andrés Masa Negreira