En España los últimos estudios realizados coinciden en señalar una tasa de casos relacionados con los trastornos alimenticios en los adolescentes es de alrededor del 4,5%, mientras que en Estados Unidos, la anorexia nerviosa supone ya la tercera enfermedad crónica mas frecuente entre mujeres adolescentes, después de la obesidad y el asma. De hecho, la tasa de mortalidad de este tipo de conductas, es la más alta entre las detectadas por trastornos psiquiátricos.
Pese a todo ello, las bases neurobiológicas de estos trastornos no está clara. Ahora, investigadores del Centro de Investigación de Nutrición del Colegio Baylor de Medicina han aportado una nueva luz. Los expertos, liderados por Yong Xu,han descubierto circuitos neuronales con la capacidad de inhibir, en ratones, la tendencia a comer de forma compulsiva. El estudio ha sido publicado en la revista Biological Psychiatry.
“La literatura científica sugiere que la disfunción del sistema serotoninérgico o el sistema de la dopamina en el cerebro podrían estar asociados con el desarrollo de esta conducta – explica Xu –. Sin embargo no hay evidencia directa para mostrar cómo este sistema afecta el comportamiento”.
En este estudio, Xu y sus colegas identificaron un circuito neuronal, en el que un grupo de neuronas vinculadas a la serotonina, activan las neuronas de dopamina. Es este circuito el quepuede inhibir el trastorno.
Además, puesto que se conocen 14 receptores potenciales que intervienen en los efectos de serotonina en el cuerpo, Xu y sus colegas identificaron un receptor específico que es importante en el comportamiento de atracones similares. Se determinó que el receptor de serotonina 2C, que se expresa en las neuronas de dopamina, es importante en la supresión de los atracones.
Xu señaló que un fármaco aprobado por la FDA, un agonista de la serotonina 2C, que actualmente está siendo utilizado como un tratamiento para adultos con sobrepeso y obesidad, podría ser reutilizado para suprimir los atracones en adultos.

Juan Scaliter