Que te abran un agujero, aunque sea microscópico, en el cráneo, no parece una perspectiva muy agradable. Pero, gracias a ello, investigadores de la Universidad de Standford, en Gran Bretaña, han conseguido que pacientes paralizados a consecuencia de un íctus cerebral, puedan volver a moverse.

Los investigadores taladraron un microagujero en el cráneo de los pacientes, a través del cuál les suministraron inyecciones de células madre, en las regiones del cerebro que habían sido lesionadas. Y el resultado ha sido sorprendente. «Esto no ha sido simplemente que antes no pudieran mover el dedo pulgar y ahora sí. estamos hablando de gente que estaba confinada a una silla de ruedas y ahora pueden andar. Muy torpemente, pero andan», explicó Gary Steinberg, uno de los responsables de estudio.

Los resultados de la investigación son realmente revolucionarios ya que, hasta ahora, se creía que el cerebro humano no podía regenerarse seis meses después de haber sufrido un íctus. y esta nueva terapia demuestra que no es así. De momento, hay que seguir investigando pero, esta terapia revolucionaria podría jugar también un papel destacado para tratar el parkinson y otras enfermedades neurodegenerativas.

http://med.stanford.edu/news/all-news/2016/06/stem-cells-shown-safe-beneficial-for-chronic-stroke-patients.html

Vicente Fernández López