Cuando se supo que Michael Jackson dormía en una cámara hiperbárica sonó a una excentricidad más, pero esta vez tenía sentido. El dispositivo ideado por la NASA proporciona oxígeno concentrado y con una presión de más de 1,5 atmósferas. Aunque sus indicaciones están sometidas a debate, se ha demostrado que aumenta el transporte de oxígeno a los tejidos.

Redacción QUO