Esta prueba ha permitido investigar casos de maltrato y evaluar su impacto emocional en un estudio en una zona marginal de Lima (Perú) con 60 niños víctimas de castigos físicos

En los dibujo que realizaron cuando les pidieron trazar una figura humana, y dibujarse a ellos mismos, apareció mayor frecuencia de brazos cortos y omisión del cuello, rasgos que sugieren retraimiento, ansiedad, timidez y falta de autocontrol

Estos son, de un modo muy simplificado, algunas interpretaciones que pueden hacerse tras el dibujo de una figura huamana:

Si la figura se sitúa en el centro de la hoja, cabe pensar en una persona positiva, con equilibrio emocional y facilidad de adaptación.

Formas reales y proporcionada: Cuanto más lo son, mayor es el equilibrio emocional.

Riqueza de rasgos: Más capacidad cognitiva.

Silueta inclinada, cabeza pequeña, manos seccionadas, estética grotesca, omisión de brazos, piernas y/o pies: refleja inseguridad y sentimientos de impotencia.

Sombreado de la cara, el cuerpo y/o las extremidades, piernas juntas, omisión de ojos y presencia de lluvia, nubes o nieve revelan ansiedad.

Figura pequeña, brazos cortos y/o pegados al cuerpo, sin nariz, boca y/o pies: revela timidez, conducta retraída, vergüenza y tendencia a paralizarse ante cualquier adversidad.
una figura desnuda, con dientes, brazos y manos grandes, es señal de ira, resentimiento y tendencia a atacar verbal o físicamente.

Rasgos faciales omitidos o poco detallados. Son un indicio de depresión, inadaptación, sentimiento de abandono u olvido.

Cabeza cortada por falta de espacio. Señal de impulsividad, tendencia esquizoide y otras patologías.
si está acompañada por adornos, como la Luna o el Sol, refleja una personalidad soñadora, cariñosa y comprensiva.

Presencia de dientes definidos, pelo de punta y brazos y manos grandes. Podría avisar de la existencia de tendencias agresivas.

Redacción QUO