El reto que se han propuesto los científicos consiste en componer el puzzle más grande que se ha hecho hasta ahora, nada menos que 20 millones de piezas, el número de proteínas que se calcula que tiene el organismo humano. Su nombre, Proyecto Proteoma Humano, da idea de lo ambicioso de la iniciativa, equiparable al genoma humano. Su objetivo es identificar las proteínas que hay en los tejidos normales y en los patológicos, de manera que pueda establecer cómo funciona y cómo actúa cada una de las piezas del puzzle en las enfermedades más importantes, desde el cáncer a los problemas cardiovasculares o neurodegenerativos.

La investigación es tan ingente que se la han repartido entre grupso de todo el mundo. Los científicos españoles estudiarán con equipos suecos y noruegos las proteínas del cromosoma 19, relacionadas con enfermedades como el alzhéimer o algunos de los cánceres de mayor incidencia como el de ovario, páncreas, mama o pulmón.

Cuando se descifró el genoma se abrieron muchas expectativas, pero su repercusión en la práctica clínica ha silo bastante limitada. El Proteoma pretende completar esa parte de conocimiento científico, imprescindible para el desarrollo de la medicina, ya que la mayoría de los medicamentos se componen de proteínas o actúan a través de ellas. Con la información que vayan obteniendo los equipos de investigadores, los médicos podrán prever, por ejemplo, si un medicamento va a sutir o no efecto en un paciente, y por otra parte, podrán diseñarse fármacos más eficaces. Juan Pablo Albar, coordinador del Proyecto Proteoma en España, explica que gracias a esta iniciativa «obtendremos una respuesta sobre el estado fisiopatológico de un individuo concreto porque podremos saber cuántas proteínas se están expresando en una célula en un momento concreto».

Redacción QUO