En China se han utilizado drones como pastores para guiar a una manada de elefantes salvajes para que atraviesen sin percances un pueblo

El cambio climático está provocando que las migraciones de elefantes sean cada vez más largas, y por tanto existen más posibilidades de que encuentren lugares habitados por humanos en su camino. Lo elefantes son realmente inteligentes, pero su paso por zonas urbanas representa un peligro tanto para ellos como para sus habitantes.

Un novedoso método ha permitido pasar a una familia de 14 elefantes a través de un pueblo sin ningún percance. Mediante drones con control remoto, un equipo de guardias forestales ha pastoreado a los elefantes es su travesía urbana en un pueblo del Este de China.

La manada liderada por una elefanta con dos crías avanza 30 kilómetros diarios, siempre por la ruta más óptima hacia el alimento. Son capaces de utilizar ramas para alcanzar objetos, abrir puertas con la trompa e incluso utilizar barro para protegerse de las quemaduras solares. Un comportamiento muy interesante, pero que podría hacer estragos en las ciudades que crucen.

Preparaciones para recibir a los elefantes

En cuanto las autoridades se dieron cuenta de que los elefantes iban a cruzar un pueblo, notificaron con antelación a los habitantes para que se preparasen. Antes de que los elefantes llegasen unos altavoces avisaron a la ciudadanía de que tendrían que estar un tiempo en casa con todo cerrado. Después se cortó la electricidad para evitar que los animales se electrocutasen si rompían cables de alta tensión. Por último, los drones condujeron a la manada por la ruta más segura a través del pueblo.

Los drones ya se han usado numerosas veces para ayudar a la naturaleza, como los drones que polinizan con pompas. En esta ocasión los drones revisaban el recorrido de estos mamíferos hasta un punto fuera de la ciudad en el que se habían preparados plátanos y otras frutas favoritas de los elefantes.

El público chino de la región está encantado con el paso de los elefantes por el pueblo, dado que normalmente estos animales no suelen ir tan al norte. Como los drones incorporaban cámaras, los ciudadanos han podido ver el paseo de los animales por su pueblo en directo. Los elefantes han curioseado por las calles, se han echado una siesta en las afueras, e incluso han calmado su sed con alcohol de grano. Un ejemplo más de cómo la tecnología y la naturaleza se pueden dar la mano.

Créditos imagen de cabecera: Richard Du Toit