Las zapatillas se han convertido en el calzado más popular y también en el más contaminante, pero estas marcas españolas apuestan por hacerlas naturales, recicladas, reciclables, justas y solidarias

Las zapatillas deportivas han conquistado nuestros pies. En los últimos cinco años este tipo de calzado ha crecido de forma exponencial, y se espera que en 2025 el mercado duplique su tamaño respecto a 2016.

Cada año se producen más de 24.000 millones de pares de zapatos y las zapatillas deportivas las que representan la mayor parte, en muchos casos producidas en países en desarrollo en condiciones de explotación. Este calzado también es el más contaminante.

La mayoría de las zapatillas deportivas están fabricadas predominantemente con plástico o materiales similares, que incluyen poliéster, poliuretano termoplástico (TPU), tereftalato de polietileno (PET) y etileno-acetato de vinilo (EVA).

Las emisiones producidas por la fabricación de zapatillas representan un 1,4% del total, que no parece mucho, pero para ponerlo en contexto, no anda muy lejos de las emisiones producidas por todos los viajes en avión, que son un 2,5%.

El plástico ha hecho que las zapatillas sean mejores, más ligeras, cómodas y accesibles. Pero la combinación de diferentes plásticos cosidos y pegados de forma complicada hace que sean muy difíciles de reciclar.

Cada vez más personas están tomando conciencia de que lo que ponen en sus pies tiene un impacto en el medio ambiente, y optan por marcas que utilizan materiales naturales, reciclados y reciclables. España es una referencia mundial en la fabricación de calzado, y sus fabricantes no se quedan atrás. Estos son algunos ejemplos.

Tropicfeel, recicladas y todoterreno

Las zapatillas de Tropicfeel son realmente todoterreno. Están diseñadas para poder sumergirse en agua, nadar con ellas, expulsar el agua rápidamente, secarse rápidamente y seguir la marcha. Además, son muy elegantes y disponen de varios modelos llamados Canyon, Monsoon, Sunset, y el nuevo lanzamiento Jungle. También tienen una mochila, Shell, y prendas de vestir.

La empresa tiene sede en Barcelona y fabrica sus zapatillas con un 77% de poliéster reciclado en los separadores (las fibras del medio son imposibles de fabricar a partir de productos reciclados (por el momento, indican), un 20% de EVA reciclada en las suelas. La plantilla es de stroble 100% reciclado, el embalaje es cartón reciclado y no utilizan disolventes tóxicos.

Además, la firma es socia de Blue-sign, abogan por el turismo sostenible, cuenta con su propio bosque y el pasado día de la tierra plantó cinco árboles por cada par de zapatillas vendidas.

Yuccs, las más naturales

Yuccs Bamboo Sport

Yuccs Bamboo Sport

Está firma de Mallorca ha apostado fuertemente por usar materiales naturales en sus zapatillas, sin por ello renunciar al confort o la durabilidad. Sus modelos más vendidos están fabricados con lana merina, la lana de oveja de mayor calidad por su suavidad y resistencia. La plantilla está hecha con aceite de ricino, la suela de caña de azúcar

Al contrario de los que pudiera parecer, es un calzado capaz de regular la temperatura, fresco en verano, y al mismo tiempo cálido en invierno. El material es renovable, biodegradable, transpirable y , antibacteriano.

Además de sus modelos en lana, Yuccs ha lanzado nuevos modelos con un tejido de bambú, aún más fresco, transitable, lavable y muy suave y resistente, además de naturalmente antibacteriano y antiolor. Algo importante en los meses de verano.

Zhoes, veganas y solidarias

Zhoes Baffin

Zhoes Baffin

Esta marca fabricada en España al 100% utiliza únicamente materiales naturales y plásticos reciclados. En el caso de los plásticos se procesan mediante un sistema de vulcanizado de bajas emisiones de C02, y garantizan que no hay fibras de origen animal en sus productos.

Las zapatillas de Zhoes son muy cómodas y atractivas, tienen una suela de caucho natural elástica y resistente, una plantilla interior transitable y antibacteriana con olor natural a fresa.

La empresa tiene el compromiso de donar parte de sus beneficios a la Fundación Ecomar, dedicada a la limpieza de los mares y al reciclaje de la basura en sus aguas, hasta el día que consiga tener emisiones cero.