En estas imágenes podéis contemplar algo que los investigadores sabían pero hasta ahora no se había visto: escapes de metano bajo el Océano Ártico. Este gas, principal causante del efecto invernadero, se encuentra en grandes cantidades en el fondo marino. Concretamente, estas imágenes han sido tomadas a profundidades en torno a los 1000 metros.

Según reconoce Giuliana Panieri, una de las científicas que participaron en la expedición, «cuando pensamos en los fríos fondos marinos del Ártico nadie piensa en estos bellos colores. Pero algunos de estos organismos son de gran belleza. Es increíble». Estas coloridas criaturas marinas viven cerca de filtraciones de metano o en zonas del océano donde se libera metano de forma natural. Esto se produce a consecuencia de la reacción química entre el agua y las rocas del manto expuestas en fallas. El metano se va filtrando poco a poco y termina en los sedimentos marinos en forma de gas, el cual contribuye a la acidificación del mar y a liberar dióxido de carbono cuando se oxida.

Los científicos han estimado que las concentraciones de metano en los fondos marinos del Océano Ártico son de unas 15000 gigatoneladas. Una cifra tan alta que ha provocado que los investigadores presten especial atención al tema con el fin de averiguar cómo puede afectar al clima.

En las imágenes se puede observar una gran cantidad de criaturas que viven en este ecosistema como anémonas, esponjas o gusanos marinos.

Fuentes: 

livescience.com | phys.org |

Anémonas, esponjas y gusanos a 500 metros de profundidad

Una raya a 1200 metros de profundidad

Un lirio de mar

Un gusano marino

Un grupo de bacalaos recorriendo el fondo marino