Anne es el nombre con el que un equipo del Smithsonian Tropical Research Institute bautizó a una hembra de tiburón ballena, que formaba parte de un grupo de 45 ejemplares que fueron monitorizados para estudiar mejor el comportamiento de esta especie que se encuentra en peligro de extinción.

Y Anne ha protagonizado una gesta asombrosa al realizar una migración de 20.142 kilómetros a través del Océano Pacífico. La mayor conocida hasta la fecha en esta especie. La ruta comenzó en aguas de Panamá. Luego, se desplazó hasta Hawai, a las Islas Marshall, y finalmente acabó su viaje en la Fosa de las Marianas, cerca de la isla de Guam.

Las hembras de esta especie pueden nadar hasta una media de 67 kilómetros al día, aunque aún no se sabe con certeza cual es la causa de que realicen desplazamientos tan grandes. Los investigadores barajan varias hipótesis para explicar este comportamiento, entre ellas que lo hagan para buscar nuevas fuentes de alimento o para aparearse.

Fuente: SINC.

Vicente Fernández López