Seguro que más de una vez has visto ‘caras’ en objetos. Una cara que parece adivinarse en una taza de café, un objeto inanimado que parece que sonríe o coches ‘enfadados’. La ciencia también ha descrito este fenómeno, que se llama pareidolia y hasta ahora se creía que era una capacidad que solo teníamos los humanos.

Pero no, nuestros parientes los monos también son capaces de ver caras donde solo hay cosas. Así lo demuestra una investigación publicada recientemente en Current Biology.

En ella, los investigadores en primer lugar enseñan a los monos a observar imágenes. Posteriormente les muestran objetos que forman caras, como se puede ver en la imagen; por ejemplo en una taza de café y en una lavadora.

Para sorpresa de muchos, los monos prestaron más atención a estas imágenes, es decir, pasaron más tiempo observándolas; lo que para los científicos significa que sí detectaron las caras y por tanto el fenómeno de la pareidolia también se dan en ellos.

De hecho, los simios pasaron más tiempo mirando este tipo de imágenes que a las fotos que mostraban otros monos. Una posible explicación es que estas caras resultan más sorprendentes para ellos que las de sus compañeros simios, que, por decirlo de forma coloquial, ‘los tienen muy vistos’.

Redacción QUO