Casi todos conocemos las bondades del aguacate: es un gran antioxidante, rico en grasas saludables y lo mejor, está delicioso. Lo que desconocíamos eran las bondades de sus semillas. Según un estudio presentado en un encuentro de la American Chemical Society por científicos de la Universidad de Texas de El Valle del Río Grande, la cáscara de ese hueso que siempre despreciamos contienen diversos compuestos medicinales que podrían ser utilizados para tratar el cáncer, problemas cardíacos y otras enfermedades. Además, también es válido para la industria cosmética, de perfumes y de otros bienes de consumo.

En el mundo, se consumen anualmente cinco millones de toneladas de aguacate, así que imaginaros el partido que podríamos sacarle al descubrimiento. Aunque actualmente la semilla de este fruto se emplea ocasionalmente para producir aceite, en este proceso también se tira la parte exterior del hueso.

El equipo, liderado por Debasish Bandyopadhyay, trituró unas 300 cáscaras de semillas de aguacate, obteniendo 600 gramos de polvo. Tras procesarlo y convertirlo en cera y aceite, realizaron un análisis de cromatografía de gases y espectrometría de masas. Fue así como hallaron 116 compuestos en el aceite y 16 en la cera. La mayoría de ellos, no parecían estar presentes aun en las propias semillas.

Entre las sustancias encontradas en el aceite están el heptacosano, que inhibe el desarrollo de tumores; alcohol behenílico, un componente de los antivirales o el ácido dodecanoica, que disminuye el riesgo de padecer aterosclerosis. Por otro lado, en la cera se encontraron componentes que podrían ser de utilidad para la elaboración de dispositivos médicos, productos cosméticos o de alimentación.

Bandyopadhyay asegura que su equipo buscará ahora cómo modificar algunos de esos compuestos para que puedan ser utilizados con el fin de elaborar medicamentos con menores efectos secundarios.

Vía | seeker.com

Redacción QUO