Nunca llegaremos a saber qué se siente en un lugar a 1.000 grados de temperatura. Debe ser lo más parecido al ir al infierno, vivir el apocalipsis o aparcar tu coche negro del 93 sin aire acondicionado al Sol en verano. Por suerte, las cámaras que instalan los meteórologos para monitorizar los volcanes nos sirven para poder hacer una inmersión en esa escena e imaginar cómo puede ser ese caluroso panorama.

Precisamente es gracias a los investigadores de la Red Sismológica Nacional (Universidad de Costa Rica) por quienes podemos disfrutar de esta increíble grabación donde vemos cómo una cámara térmica nos muestra la temperatura en el interior del volcán de Turrialba cuando este entra en erupción. A pesar de que solo duró unos minutos la erupción fue bastante espectacular, violenta y energética. El viento del oeste ayudó a empeorar la escena, ya que las cenizas llegaron a cubrir una buena parte del Valle Central, una de las zonas más pobladas del país.

[youtube]https://www.youtube.com/watch?v=hElwXx3N8OI[/youtube]

El estratovolcán ha venido siendo analizado con lupa desde mediados de la década de los 80, momento en el que empezó a manifestar sospechosos cambios tras una etapa de tranquilidad. Desde entonces nos ha dado unos cuantos sustos, aunque por suerte, nunca de gravedad gracias a las labores de prevención. Una correcta monitorización constante de sus gases, la ceniza y su actividad sísmica los científicos siempre han permitido poder alertar con tiempo a la población para evacuar la zona.

Fuente: bbc.com

Redacción QUO