En 1900 había más de 100.000 tigres en estado salvaje. Poco más de 100 años después, en 2010, el número había descendido a 3.200. Este año, por primera vez desde inicios del siglo XX, el número de tigres está aumentando y, de acuerdo con un informe elaborado por Fondo Mundial para la Naturaleza (WWF) y el Foro Mundial del Tigre con la ayuda de grupos de conservación y gobiernos nacionales, asciendea 3.890 ejemplares que recorren desde Rusia a Vietnam.
El estudio muestra algunos datos curiosos, como que la India posee más de la mitad de los tigres (unos 2.226 según el último recuento) y que Rusia, Nepal y Bután han aumentado también sus cifras. «Más importante que los números absolutos es la tendencia, y estamos viendo la tendencia va en la dirección correcta», explicó Ginette Hemley, vicepresidenta de conservación en WWF.
Al mismo tiempo, Camboya está tomando medidas para reintroducir a los tigres dentro de sus fronteras e Indonesia busca cambiar de políticas de conservación, ya que es el país que ha visto un descenso más rápido, gracias a que tiene la mayor tasa de destrucción de los bosques del mundo para satisfacer la creciente demanda de la producción de aceite de palma, celulosa y papel.
Pese a ser motivo de reconocimiento, las cifras están muy lejos de ser las adecuadas, sobre todo teniendo en cuenta que en Estados Unidos hay más tigres en cautiverio, 5.000 en total, que libres en el mundo entero.

Juan Scaliter