Parece un lugar ideal para darse un baño con la familia o con los amigos ¿verdad? el bello color turquesa de sus aguas invita a sumergirse en ellas y tomar un refrescante baño. Así fue durante varios años. Nadie dejaba pasar la oportunidad de darse un chapuzón en tan bonito espectáculo. Pero lo que no sabían, es que sus aguas son altamente tóxicas.

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Anteriormente, este bello lago formaba parte del escenario de una zona industrial. Por ello, residuos contaminantes fueron vertidos en la laguna, aunque los desechos tóxicos no son el único peligro que contienen sus aguas. En su interior pueden encontrarse restos de automóviles, animales muertos, basuras y excrementos. Por no hablar de que el sitio ha sido utilizado como vertedero.

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Para alertar del riesgo que corren los bañistas, varios letreros como este fueron colocados en los alrededores de Blue Lagoon. En ellos también se advierte de que los niveles de pH son de 11,3. Para que os hagáis una idea, el pH del amoniaco es de 11,5 y el de la lejía de 12,6.

A pesar de ello, la gente seguía bañándose atraídos por sus bonitas aguas azules, cuya coloración es atribuida a las rocas calizas que filtran los cristales de calcita y le dan esa tonalidad turquesa. Por esta razón, las autoridades de Derbyshire le pidieron al dueño de la laguna que la tiñese de negro, con el fin de quitarle esa belleza engañosa. El propietario de Blue Lagoon estuvo de acuerdo y se procedió a teñir la laguna. Cuando los habitantes locales y los excursionistas fueron a bañarse desistieron en su empeño al ver, decepcionados, el nuevo color del agua. Misión cumplida.

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Fuente: atlasobscura.com

Redacción QUO