Los animales marinos que viven bajo el hielo polar tienen que enfrentarse a una amenaza que ni tan siquiera está viva: los carámbanos submarinos conocidos como «Dedo de la muerte».

Texto de @MarGomez. Doctora en Físicas. Responsable del área de meteorología de @eltiempoes

La forma de este carámbano es similar a la de unos tentáculos de hielo que se extienden desde el techo helado hacia el fondo del lecho marino. Para que se constituya es necesario que haya «hielo marino» – que para formarse, expulsa la sal del mar creando un exceso de esta conocido como salmuera. La salmuera se acumula en el agua circundante pero también sobre el hielo. Cuando dos placas se juntan tienden a unirse por la parte inferior dejando el exceso de salmuera en la superior.

A veces, esta salmuera encuentra un conducto por el que llegar al mar. Como la sal es más densa y pesa más, comienza a hundirse. Además, como su punto de congelación es inferior al del agua, no se congela, pero sí lo hace el agua a su alrededor. Cuando llega al suelo extiende sus tentáculos de modo que aniquila todo a su paso.

Hay que tener en cuenta que los animales que viven en estas zonas tienen un metabolismo muy lento y es por ello por lo que pueden ser atrapados por el carámbano de la muerte.

Fuente imagen: Documental BBC